El Tribunal Supremo de Puerto Rico celebró el viernes, 29 de enero de 2016, una sesión especial con motivo del retiro de su Jueza Presidenta, Hon. Liana Fiol Matta. Al dirigirse a la personas congregadas en el Salón de Sesiones del histórico recinto judicial la Jueza Presidenta expresó que al concluir su carrera judicial y su incumbencia en la presidencia del Alto Foro “con plena satisfacción puedo afirmar que logré mi sueño de plasmar el producto de un análisis crítico, profundo y sosegado en las páginas de la historia de nuestro Derecho, adelantando así las causas que siempre alimentaron mi espíritu luchador: la igualdad de todos los seres humanos ante la ley, la protección de los derechos de las personas más desventajadas, la conservación de nuestro medio ambiente y, claro está, la equidad de género”.
En la primera parte de su mensaje la Jueza Presidenta hizo en recuento de su obra como administradora de la Rama Judicial y repasó algunos de los casos más importantes de su gestión judicial. Además, expuso una profunda reflexión de la gestión adjudicativa que realizan los jueces y las juezas.
Del ámbito administrativo resaltó las medidas de economía que se vio precisada a implementar como resultado del recorte que sufrió el presupuesto de la Rama Judicial al inicio del año fiscal 2014-2015 y las economías generadas por esas acciones. “Todas estas decisiones en materia fiscal se tomaron luego de mucho análisis, con el objetivo de proteger el acceso a la justicia, la seguridad laboral de los empleados y empleadas de la Rama Judicial y, más importante aún, de asegurar la capacidad de cumplir cabalmente con la encomienda constitucional de hacer justicia”, explicó.
“El camino ha sido difícil, pero lo hemos logrado. Llegado el término de mi presidencia, miro con satisfacción los resultados que alcanzamos, pues logramos, a mi entender, un balance entre los intereses de la justicia y la realidad económica y fiscal del País”, aseguró la Jueza Presidenta.
Fiol Matta resaltó de manera especial su legado relacionado a la educación. “No puedo dejar de mencionar –y encomendar encarecidamente a mi sucesor o sucesora- algo que desde el principio ha estado muy presente en mi agenda presidencial: la educación de la comunidad –jóvenes y adultos-sobre sus derechos y sus deberes cívicos y cómo la Rama Judicial les sirve como instrumento para hacer valer esos derechos. Créanme que no hay medio más efectivo para fortalecer el acceso a la justicia que la educación ciudadana. Por eso creé la Oficina de Educación y Relaciones con la Comunidad, y la semana pasada, cuando visité a un grupo de estudiantes de sexto grado de la escuela Emilio Castelar y Ripoll, vi ese convencimiento materializado en los rostros de los niños que conversaron conmigo y en el agradecimiento de sus maestras y maestros, que celebraron esta iniciativa de la Rama Judicial”.
La segunda mujer en ocupar la presidencia del Tribunal Supremo también repasó las medidas adoptadas para reforzar la confianza del país en el sistema de tribunales. Estas acciones fueron realizadas en respuesta a incidentes relacionados con integrantes de la judicatura que, según sus palabras, “no han cumplido su deber con la justicia y con el Pueblo”.
“Como Jueza Presidenta he dedicado todo mi empeño para lograr que no se pueda cuestionar la legitimidad de nuestro sistema judicial”, aseveró y reafirmó su convencimiento de que estas personas no representan la Judicatura del País. “El País debe tener la certeza de que sus jueces y juezas son personas íntegras que pueden identificar las necesidades de las personas que acuden a sus salas y resolver las controversias recurriendo exclusivamente a sus conciencias, a la Ley y al derecho aplicable”, aseguró.
Con respecto a la función adjudicativa que realizan los jueces y las juezas, Fiol Matta resaltó la importancia de abordar el Derecho “desde una mirada humana, anclada en el contexto social y económico en que vivimos”.
“A lo largo de mi carrera como jueza, primero en el Tribunal de Apelaciones y luego en el Tribunal Supremo de Puerto Rico, me he visto envuelta en esa enriquecedora tarea de ir creando una metodología de adjudicación que responda a los valores y la visión del derecho y la justicia en los que creo. El proceso no ha sido sencillo, porque el derecho no es algo sencillo. Por el contrario, como toda actividad humana, responde a circunstancias de tiempo y lugar que reflejan las necesidades y aspiraciones diversas y cambiantes del ser humano”, aseveró.
La Jueza Presidenta expuso como ejemplos algunas de sus opiniones en varios casos, como Ex Parte Delgado Hernández, caso en el que al disentir de la decisión mayoritaria, instó al Tribunal a recordar la “enorme riqueza normativa del principio de equidad”. También mencionó como ejemplo su disidencia en el caso Pueblo Vs. Flores Flores, donde señaló que la decisión del Tribunal dejaría desprotegidas a “cientos o miles de mujeres que, si bien son adúlteras, son tan susceptibles o vulnerables como una esposa o una novia a la agresión física o psíquica del maltrato de pareja”.
“Para lograr Justicia, los jueces no podemos juzgar de forma descontextualizada, abstrayendo los hechos del caso de su entorno social y divorciando la norma de su razón de ser. Conceder primacía ciega a la letra de la Ley no es la forma de encontrar una solución correcta en todos los casos, y el interés en mantener la certeza de las instituciones jurídicas no es razón suficiente para ignorar la realidad”, afirmó Fiol Matta.
“Al concluir este capítulo tan importante en mi carrera profesional, les aseguro que mi vocación de hacer justicia no ha mermado y, sin duda, me impulsará a continuar a su servicio desde otros escenarios”, concluyó la Jueza Presidenta.
La Sesión Especial contó con la presencia del Gobernador de Puerto Rico, Hon. Alejandro García Padilla. Los mensajes especiales de la ocasión estuvieron a cargo de la expresidenta del Colegio de Abogados y Abogadas de Puerto Rico, licenciada Celina Romany Siaca, y el hijo de la Jueza Presidenta, el doctor Yussef Galib Fiol.
